miércoles, 6 de enero de 2010

Adiós, Roberto (y algunas otras cosas más)

eugeñia dice:
una noticia muy triste

Jovic dice:
muy triste
cuando muere alguien como Sandro, se muere una parte de nosotros
o nos damos cuenta, al menos, de que una parte de nosotros ha muerto
cuando me enteré de la noticia
supe
confirmé
me di cuenta
de que también se había muerto el niño de cinco años que fui una vez
ese mismo niño que lo vio en el teatro Astros
y dijo: quiero ser como él
conmovido porque él había tirado su tapado de piel
que tenía sobre sus hombros
con un movimiento genial
estupendo
maravilloso
qué sería de mi vida si no hubiera ido a ese recital?
no lo sé
nadie sabe
pero, el saber está muy sobrevalorado
será porque nos da miedo sentir?
es posible que la frase de Lispector que usted me presentó día a día adquiera una importancia más grande?
una lamentable importancia
una paupérrima verdad

eugeñia dice:
querido
escribalo
solo le digo
que el niño no muere
puede ser tapado
por otras cosas
pero siempre esta ahi

Jovic dice:
eso me da una esperanza
quizás, esté debajo de los escombros
esos escombros que dejan las explosiones sufridas en la vida
pero, no lo tome como una queja
lo de las explosiones
es, más bien, una mirada
sin juicio
ni castigo
pero
cuando uno se encuentra
con una persona especial
pongamos, por ejemplo
una muchacha sensible, de aspecto frágil y unos ojos preciosos
más una mirada que conmueve más que el hambre en Sudán
no sé si el niño niño
pero, el adolescente
el muchachito curioso, travieso y lleno de vida y de ganas de los diecisiete
vuelve
resurge
renace
revive
y eso se siente maravillosamente bien.

domingo, 3 de enero de 2010

Tener o no tener

Si ella necesita tiempo,
tengo tiempo para darle.
Si ella quiere otra cosa,
tengo todo para darle.