sábado, 30 de agosto de 2008

San Martín y algún apunte más


El 17 de agosto de 1850 amaneció nublado en Boulogne Sur Mer. A la tarde, luego de almorzar, murió el General San Martín. Hoy, dos días y ciento cincuenta y ocho años después, mientras desayuno, me doy cuenta de que estoy comenzando a no morir de amor por vos. Ya veré cómo me las arreglo.

Héroe


El héroe de las mujeres - observó Laura - no siempre es el héroe de los hombres.

lunes, 18 de agosto de 2008

No podés callarte

Dos ó tres minutos,
escuchándote hablar,
me bastan para darme cuenta de por qué
no funcionó
nuestro amor.

lunes, 4 de agosto de 2008

Adios sin acento en la O

Esta despedida no es muy seria ni sensata,
quizás, porque yo no soy un hombre sensato ni serio;
solamente, soy lo que ves: un niño con bigotes y un pase libre para la calesita del barrio.

Escape emocional, huida cobarde, sí
pero no tan repentina ni tan sorpresiva
como lo traducen en este amanecer tu rostro y tus lágrimas orientales.

Este chau es tonto, inútil e histérico.
Este adiós no es otra cosa que un "hasta luego" maníaco,
un adios irresponsable, sin sentido ni acento en la O.